21.7.11

Euclidiano.

Olympe le entrega su sangre a Max desde el minuto en que él le toma el cuello y ella se le derrite entre los dedos. Ella sucumbe ante su labio mordiendo y su voz tranquila. Ante todos los dias Todos. Ante el perdón, la respiración pausada y la fuerza de esos dedos delicados y artistas que la toman con la brutalidad y la belleza con que se atraviesan las líneas perpendiculares.

A veces, se tocan con la palma abierta. Luego de dar tantos palos de ciego, y de tantear entre la niebla, el reconocimiento es un poco romperse la piel por la fricción del tacto. Pero nada que no se cure lamiendo las heridas hasta que el sabor metálico de las sangres compartidas sea indistinguible y lo único que quede sea inventar mitologías para contener las explosiones por todas las aristas convergidas.


17.7.11

Te molesta mi amor. Silvio Rodriguez.




Te molesta mi amor
Mi amor de juventud
y mi amor es un arte de virtud
Te molesta mi amor
Mi amor sin antifaz
y mi amor es un arte de paz

Te molesta mi amor
Mi amor de humanidad
y mi amor es un arte en su edad
Te molesta mi amor
Mi amor de surtidor
y mi amor es un arte mayor

Mi amor es mi prenda encantada
es mi extensa morada
es mi espacio sin fin
mi amor, no precisa frontera
como la primavera
no prefiere jardin
Mi amor, no es amor de mercado
porque un amor sangrado
no es amor de lucrar
mi amor es todo cuanto tengo
si lo niego o lo vendo
para que respirar...

Te molesta mi amor...

Mi amor no es amor de uno solo
sino alma de todo
lo que urge sanar
mi amor es un amor de abajo
que el devenir me trajo
para hacerlo empinar

Mi amor, el mas enamorado
es el mas olvidado
en su antiguo dolor
mi amor abre pecho a la muerte
y despeña su suerte
por un tiempo mejor
mi amor, este amor aguerrido
es un sol encendido
por quien merece amor...

3.7.11

Elementos de Neurociencias.

Frente a la número 5, por "la determinación del tamaño celular" y la opción "dependiendo del tamaño del organismo será el tamaño de las células", yo me pregunto si los elefantes tienen las células más grandes, me acuerdo del poema de Gelmán, del elefante que decía bonyur, me acuerdo de que ya nadie dice bonyur. La profesora que nos vigila me hace acordar a Hogwarts o al Señor de la Querencia, si se quiere algo más folclórico. Veo la pregunta del calor que movió los caldos primitivos para formar la vida y miro por la ventana y hay un cerro, un sol y mis piernas se mueven con ganas de caminar tomada del brazo o de los pecados o de los verbos. Soy un caldo primitivo, como si la palabra caldo no fuera ya lo suficientemente decidora. Me acuerdo de un montón de cosas que nada tienen que ver con el tálamo, con el cerebro o con la fisura de Rolando. Me acuerdo que en un momento de mi vida, cuando tenía como 12 años ,me gustó un sujeto que se llamaba Rolando y que probablemente sea un buen hombre hoy porque una vez que me salió sangre de narices me preguntó qué me había pasado y yo le respondí que me habían pegado y él preguntó ¿quién? como para hacer algo. Ese gesto me hizo sonreir y, bueno, suerte Rolando. Me acordé de las mil veces que he sonreido estos días hasta que me duele la cara. Me acordé de "quiero agarrarte y huir del universo con vos" que me mata y me hace sonreir de nuevo. De las veces que me he muerto por estos días de las más diversas maneras y de cómo eros y tánatos se me juntan en un revoltijón que habría desafiado a Freud. Me acuerdo de que me encontraras desafiante y que me leas como libro y pasas tus dedos despacio por cada una de mis hojas. Y lo sexy que suena esa última línea me hace perder absolutamente la concentración en que tengo 7 hojas por contestar y nada me hace sentido, pero no importa, habrá tiempo para todo y para llamarte después de terminar esto y contarte que fue un desastre y reirnos juntos en alguna una canción kitsch que estoy buscándote. Me acordé de que el hemisferio derecho es el de la creatividad y que yo soy una palabra limpia y precisa al lado tuyo, como nunca. Me acordé de que sé tanto de posmodernismo pero no sé nada de neurociencias. Me pregunté si te gustaría tanto si fuera bióloga. Y creo que no.

No terminé este texto porque en ese preciso momento entregué el examen con la dignidad de Juana de Arco. Pero es una linda evidencia.